VEINTISÉIS
Las paredes del viejo edificio en el que vive ahora Lucas se van quedando atrás desde el mismo momento en el que los dos amigos empiezan a correr. El cielo está nublando a pesar de ser verano, pero eso no impide que la calle esté llena de personas, sobre todo turistas que andan despistados buscando los monumentos más emblemáticos de Madrid. Pablo y Lucas intentan acelerar el ritmo, pero es imposible correr entre tanta gente.
-Esto parece una carrera de obstáculos. Yo así no puedo.
-Anda, Pablete, que lo que te pasa a ti es que no tienes resistencia física ninguna y estás ya que no puedes más jajajaja. La próxima vez me traigo a Marcos, que seguro que aguanta más que tú.
-Ya... -Pablo lo dice tan bajo que Lucas casi no lo oye.
-¿Qué te pasa?
-Nada.
-¿Seguro?
-Sí.
-No me lo creo.
-Eso no es cosa mía.
Lucas frena en seco y Pablo hace lo mismo cuando lo ve.
-¿Por qué paras?
-No me voy a mover de aquí hasta que no me digas qué te pasa con Marcos.
Pablo suspira mirando al suelo y acto seguido levanta la cabeza en dirección a Lucas.
-Te lo cuento si nos tomamos mientras una cerveza.
-Jajajaja ¡Sabía que estabas agotado! Venga, anda, vamos donde ayer a ver cuantas marcas tiene la camarera esa en el cuello.
-No, mejor vamos a otro sitio. Para una vez que estoy en Madrid, no voy a ir siempre al mismo bar, ¿No?
-¿No te gustó?
-Claro que me gustó. Lo pasamos muy bien.
-¿Entonces? Es el sitio más barato que conozco y no es que estemos muy bien de dinero ahora mismo. Además, tenemos que asegurarnos de que Marcos no nos ha fastidiado el contrato para Acclaim.
-Oye, que soy yo el que tiene el problema. Me toca a mí elegir sitio.
-Está bien... Tú decides, pero espero que sea un sitio barato o me vas a invitar tú.
-Hecho.
-¡Joder! ¡Sí que es grave lo que te pasa! ¿De verdad me vas a invitar? ¡Esto no lo he visto yo nunca en mi vida! Jajajajaja
-¡Qué cabrón! Vamos anda, que mis piernas ya no pueden con mi cuerpo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario